Referencias bibliograficas en la oposición (I)
En los criterios de evaluación de los tribunales de oposición, la bibliografía —o referencias— suele ser un punto fijo ya que es indudable la importancia de fundamentar científicamente el tema que desarrollemos, la programación didáctica (PD) y la unidad didáctica (UD). Ante la incertidumbre de cómo afrontar este apartado vamos a basarnos en evidencias.
La primera de ellas es consultar los citados criterios de los tribunales de oposición. Como es obvio, hay que leer con atención en que se van a basar para evaluarnos este apartado y cumplirlo para obtener la máxima puntuación.
La segunda certeza irrefutable. No estamos escribiendo un artículo científico. Si lo hiciésemos tendríamos que utilizar las normas de citación de la APA (American Psychological Association). Para el examen de oposición podríamos elegir el mismo formato pero no es una obligación. Mi recomendación es citar de forma más flexible utilizando el apellido del autor que más se utilice o que nos sea fácil de recordar.
Vamos a ir respondiendo preguntas…
¿Tengo que poner el año y la editorial? Para destacar hay que demostrar nuestros conocimientos. Si podemos recordar la referencia completa de unas cuantas obras, mejor. Hay mucho que memorizar pero si logras recordar las obras en las que basas tus argumentos ganarás muchos puntos para el tribunal.
¿Cuántas referencias pongo? Hay que intentar poner el mayor número de referencias posible pero que sean pertinentes y actuales. Hay autores de reconocido prestigio que pueden, y deben, seguir siendo citados —Piaget, Vigostky…— pero hay que mostrar al tribunal de la oposiciónque somos profesionales que nos actualizamos y seguimos las últimas tendencias.
¿Cuándo? ¿La primera impresión es la que cuenta, o terminar con un buen sabor de boca? Si tengo que elegir me quedo con la bibliografía al inicio del tema. Es una buena carta de presentación, conseguirás que el tribunal de la oposición te escuche —o te lea— con más atención y evitarás que te quedes sin tiempo para incluirla. Este error no debería ocurrir nunca pero… ¡por si acaso!. Tú eliges.
¿Hay que poner solo las referencias que aparecen en el tema? La respuesta vuelve a ser que no. Recuerda que no es un texto científico ni un libro, es una oposición. Si al redactar el tema recuerdas algún autor que no incluyes en la bibliografía lo puedes citar, aunque yo no haría una referencia completa con año y editorial porque puede hacer que la lectura no resulte fluída.